miércoles, 18 de marzo de 2015

SUDADERA

Hace tiempo, la musculosa blanca,
se rajó del trocen de Buenos Aires.
La musculosa aquella,
que mientras vos acamalabas bolsas en el Abasto,
te aspiraba el sudor y tu fragancia
como si fueran gotas de rocío en un jazmín...
¡Y toda blanca
se empapaba hecha un enchastre
la musculosa!

Se fue tras de las minas
a botonear tetas por la lleca,
¡linda y campante,
con el ombligo al aire,
se pasean de musculosa blanca los pimpollos!
-¡Boludo, che chabón!
No te junaste en el semáforo
ese trasero rítmico y en mini,
¡ese, el de la musculosa blanca!

Parpadeo con rimel indelebele
abaraja de volada tus fachadas,
y un disco rayado se queja en las esquinas
de tu loco despelote, Buenos Aires.
Dado vuelta, en el cordón de la vereda,
de musculosa blanca todavía,
un flaco se juega las gambas
a la rantifusa cordura de algún colectivero.

                                                      Marzo 2015 Bs. As.


No hay comentarios:

Publicar un comentario